Luany, Casandra, Yendry, Marisol, Fernanda, Grettel. Algunas tenían hijos, otras llevaban una carrera universitaria o soñaban con ser profesionales, mientras que otras no habían salido del colegio. Sus historias, entornos y expectativas eran distintas, pero todas tienen en común que fueron víctimas de femicidio en el último año.

 

Sus rostros y voces ya no están, pero un esfuerzo interinstitucional apoyado por el  Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), busca concientizar a la ciudadanía sobre la situación del femicidio en Costa Rica con la colocación en el Parque Central de San José de 15 figuras de siluetas femeninas de tamaño real, que representan a cada una de las mujeres que fallecieron en 2021.

 

La iniciativa, a la que se le ha dado por nombre “Las que ya no están”, es impulsada por el Ministerio de Justicia y Paz, el Proyecto InfoSegura PNUD-USAID, la Municipalidad de San José y la Comisión Técnica Interinstitucional sobre Estadísticas de Convivencia y Seguridad Ciudadana (COMESCO).

 

La exposición -que se exhibirá por tres semanas- fue inaugurada esta mañana en el Parque Central de San José, en un acto al que acudieron Fiorella Salazar Rojas, ministra de Justicia y Paz; Marcela Guerrero Campos, ministra de la Condición de la Mujer y presidenta ejecutiva del INAMU; José Vicente Troya Rodríguez, Representante Residente del PNUD en Costa Rica y Paula Vargas Ramírez, alcaldesa a.i de la Municipalidad de San José. Además, participaron familiares de las víctimas.

 

La intención es hacer un llamado vehemente a la ciudadanía para disminuir los hechos de violencia por condición de género y visualizar el femicidio como un hecho atroz contra la vida de las mujeres que afecta su entorno familiar y comunal.

 

 

 

 

“A pesar de que las mujeres asesinadas físicamente ya no están, queremos que su presencia se sienta en la conciencia colectiva del país, recordándonos que aún nos falta camino para evitar que los femicidios sigan sucediendo. Nos falta en educación de masculinidades y feminidades saludables para niños y niñas; nos falta en autoconciencia y sororidad de nosotras las mujeres para no tolerar y buscar ayuda. Y nos falta como sociedad para no normalizar ni reproducir comportamientos violentos que aún pasan desapercibidos o se miran como bromas. Del esfuerzo colectivo saldrá la erradicación de este mal solo si tomamos plena conciencia y responsabilidad”, comentó la ministra de Justicia y Paz, Fiorella Salazar Rojas.

 

“Cada mujer ausente representada en estas siluetas es un mensaje para la sociedad que reafirma que ningún tipo de violencia machista puede ser permitida. Hacemos un llamado para no dejar solas a las mujeres que son víctimas de violencia y para que las personas cercanas que se enteran que sus amigas son víctimas de violencia les acompañen a denunciar”, señaló Guerrero Campos.

 

La actividad fue aprovechada por la jerarca del INAMU para solicitarle a las autoridades del Congreso la aprobación del expediente 22.872 del proyecto de Ley de Reparación Integral para Personas Sobrevivientes de Femicidio.

 

“El vacío irreparable que sufren las hijas, hijos y personas cercanas víctimas de la pérdida de una mujer por el delito de femicidio deberá ser al menos considerado por los diputados y diputadas con la aprobación de este proyecto de Ley que pretende que el Estado y la sociedad se responsabilicen por la muerte de estas mujeres”, señaló Guerrero Campos.

 

15 siluetas. Si bien las 15 figuras representan a las víctimas del año pasado, cada silueta indica algunas referencias sobre la vida de mujeres asesinadas de años anteriores, redactadas por sus mismos familiares, como símbolo de que el femicidio es una problemática que persiste en el tiempo y que le puede suceder a cualquier mujer y en cualquier momento.

 

Además, a través de otros apoyos gráficos, las personas que transiten por el lugar verán información sobre los femicidios ocurridos durante 2021 y recibirán una excitativa a buscar ayuda, así como denunciar al 9-1-1 si se es víctima de algún tipo de violencia.

 

“Cada femicidio, cada acto de violencia contra las mujeres es una derrota, es un fallo del Estado y de la sociedad completa. El mejor homenaje que podemos hacer en su memoria es promover políticas y conductas transformadoras que erradiquen para siempre aquella cultura patriarcal que justifica y alienta la violencia que afecta a las mujeres y a las niñas”, puntualizó José Vicente Troya Rodríguez, Representante Residente del PNUD