El Gobierno de la República comunicó que Costa Rica es un país líder en conservación ambiental, su legado y su trayectoria en protección de los recursos naturales y marinos son elogiados por todo el mundo. Hoy en una decisión valiente, el país vuelve a ser ejemplo mundial y da un paso adelante para prohibir por medio de un Decreto Ejecutivo la pesca de tiburón martillo .
Según indica el documento suscrito el día de hoy por el presidente de la República, Rodrigo Chaves Robles y los ministros de Ambiente, Energía y Agricultura, Franz Tattenbach Capra y Víctor Carvajal Porras, desde ahora en Costa Rica, se prohíbe la captura, retención a bordo, transbordo, descarga, almacenamiento, y comercialización de productos y subproductos de los tiburones martillos (Sphyrna lewini), (Sphyrna zygaena), (Sphyrna mokarran); en parte o entero.
Cuando se presenten capturas incidentales de tiburones martillos (Sphyrna lewini), (Sphyrna zygaena), (Sphyrna mokarran), los mismos deberán ser liberados con prontitud ilesos en la medida de lo posible, así como registrar los datos para informar al INCOPESCA.
El INCOPESCA en coordinación con el MINAE y el Sistema Nacional de Áreas de Conservación (SINAC), definirán lineamientos y herramientas para las buenas prácticas para la liberación de los tiburones martillo (Sphyrnidae) que son capturados de forma incidental.
Tras la sanción del Decreto, posterior al Consejo de Gobierno, el mandatario resaltó que este es un gran logro para las y los costarricenses, ya que esta especie tiene un lugar muy especial en nuestro ADN de conservación ambiental, por lo que lo encontramos en nuestros billetes, tenemos santuarios para su protección y miles de turistas nos visitan para observar esta especie que está en peligro de extinción y es muy fuerte en el sentir costarricense los deseos de protegerle y a sus crías.
Nuestros turistas vienen a ver tiburones martillos a Costa Rica, en especial a la Isla del Coco, o a la Zona Sur, donde tenemos un santuario en Golfo Dulce.
La Isla del Coco es un Sitio Patrimonio de la Humanidad que goza de las mayores congregaciones de tiburones martillo (Sphyrma lewini) del mundo en el Océano Pacífico.
El Santuario del Tiburón Martillo de Golfo Dulce Costa fue declarado así en el año 2018 con el fin de proteger las crías de esta amenazada especie. Este modelo buscaba que las comunidades costeras se involucraran y beneficien la protección del tiburón martillo.
Con esta nueva prohibición y el compromiso de las comunidades costeras, se fortalecerá la prohibición del tiburón martillo.
El tiburón martillo común (Sphyrna lewini) es una de las especies de depredadores más importantes que habita las aguas de las regiones tropical y subtropical
Al respecto el ministro de Ambiente y Energía, Franz Tattenbach Capra recordó la importancia de esta prohibición de pesca del tiburón martillo, ya que Costa Rica es miembro del Corredor Marino del Pacífico (CMAR) y es uno de los mayores impulsores junto con Francia y Reino Unido en la Coalición de Alta Ambición para la Naturaleza y las Personas (High Ambition Coalition for Nature and People, HAC 2.0) que agrupa a 116 naciones.
Esta Coalición juega un papel clave para asegurar en los próximos años la implementación de un acuerdo global para la biodiversidad adoptado en el marco de la Conferencia de Biodiversidad de Naciones Unidas (COP15), en diciembre del año pasado, que traza guías y metas concretas para revertir décadas de destrucción ambiental que amenazan con borrar especies y ecosistemas del mundo. Su objetivo principal es que, para el año 2030, las naciones firmantes (195 países) tengan protegido al menos el 30% de sus zonas terrestres y el 30% de sus mares.
Además la Junta Directiva del Instituto Costarricense de Pesca y Acuicultura, INCOPESCA, mediante el acuerdo AJDIP/017-2023, estableció nuevas regulaciones a la captura y comercialización del Pez Vela del Pacífico (Istiophorus platypterus).
A partir de esta nueva normativa, la pesca incidental no podrá exceder el 10% (peso eviscerado), de la captura total de la embarcación por cada viaje de pesca comercial no turística realizado. Además, se prohíbe la exportación de Pez Vela, medida de ordenación pesquera que será revisada anualmente. De esta forma, en caso de producirse pesca incidental de esta especie, en la actividad de pesca comercial no turística, sin que fuera posible la devolución al mar del ejemplar aún vivo, solo se permitirá la comercialización del producto en estado fresco o congelado para consumo humano exclusivamente en el mercado nacional.
Según Heiner Méndez Barrientos, ministro de Pesca y Acuicultura y presidente ejecutivo del Instituto, la iniciativa consideró el interés de los subsectores pesqueros en lograr el equilibrio entre las actividades de pesca turística y comercial, a fin de disminuir los conflictos que se generaban por el espacio donde se desarrollan las actividades pesqueras de índole comercial, así como la pesca turística. “Desde el INCOPESCA procuramos un ordenamiento de las capturas de una de las especies de interés turístico y deportivo, dado su valor para la pesca turística nacional e internacional, así como el aprovechamiento sostenible de la pesca”, comentó.
En aras de ampliar las regulaciones y los requerimientos de localización, seguimiento y control que deben ser acatados por la flota pesquera nacional y extranjera, para ejercer vigilancia sobre la pesca ilegal, así como la seguridad de las embarcaciones que realizan la pesca o que realizan actividades relacionadas con la pesca, a partir de este 28 de febrero del 2023, todas las embarcaciones deportivas y turísticas de mediana escala, nacionales y extranjeras, deberán contar con dispositivos de seguimiento satelital, y deben transmitir la información a la plataforma del INCOPESCA.
La pesca incidental es aquella en la cual los ejemplares son capturados utilizando palangre, sin mediar el uso de carnada viva, siempre que no correspondan a más del 10% de la captura total de la embarcación por cada viaje de pesca comercial no turística realizado.