Rosaura Sandí Solís es una de las dedicadas del 40 aniversario del Día Nacional del Boyero que se celebra el próximo domingo 12 de marzo en el distrito de San Antonio de Escazú.
Esta joven estudiante de sexto año del Colegio Técnico Profesional tiene 17 años y es vecina de Bebedero, San Antonio de Escazú.
"Yo observaba a mi papá desde muy pequeña, ya a los 3 años tomaba una ramita y jugaba con la carreta, a esa edad, mi padre me llevó a los primeros desfiles y el contacto diario con los bueyes tanto en la agricultura como en el trabajo me llamó la atención, hoy me enamoré de esta herencia y espero no dejarla jamás", recalcó Sandí.
El padre de Rosaura Mauricio Antonio Sandí Jiménez sufrió un grave accidente hace dos meses que lo tuvo al borde de la muerte, cuando alimentaba un buey, este le golpeó la nariz y el borde del labio, además le provocó fractura de cráneo, una experiencia para esta familia boyera que está pasando por esta experiencia con el apoyo de Rosa María Solís Rojas quien ha tenido que tomar un rol protagónico y nos señaló que conoce la labor diaria.
"Un proceso muy duro, desde el primer día, hasta ahora, cuidarlo y tomar las riendas de las funciones que desempeña mi esposo, es un orgullo para nosotros que nuestra hija sea la dedicada en esta actividad tan importante a nivel nacional", comentó Solís.
Las actividades comenzarán este viernes 3 de marzo en San Antonio de Escazú con el primer concierto de Marimbas, más detalles en: http://www.mundoescazu.com/index.php/noticias-de-escazu/este-viernes-incian-las-actividades-del-dia-nacional-del-boyero-en-san-antonio-de-escazu
La vecina de San Antonio es la hija mayor de una familia 100% escazuceña y en sus venas está el boyeo, la agricultura y el levantarse de madrugada a comenzar en el campo las labores, tiene tres hermanos Mauricio Antonio Sandí Solís de 15 años, Fauricio José Sandí Solís de 14 y Santiago Enrique Sandí Solís de 3 años quienes siguen los pasos de cerca de su valiente hermana.
"Mi papá me dejaba que llevara el chuzo desde muy pequeña, mi primer yunta que llevé sola fue a los 5 años, después de ahí cuando fui creciendo me compraron una parejita de terneros, un día llegó un amigo de Cartago a ofrecerles unos y yo le dije que yo los quería amanzar, pero yo no sabía que eran tan bravos, se veían chiquititos, los bajaron del camión y ese día uno se soltó, tuvimos que ir a agarrarlo y cuando caminamos llega uno y comenzó a brincar, en un brinco de esos me golpeó y yo me caí, tenía como 7 años y en ese momento yo le dije papi yo ya no los tengo más, tómelos usted, él me respondió NO, usted los quiso llevar ahora hasta el final", cuenta nuestra dedicada escazuceña.
Gato y Chino son los bueyes que acompañan a nuestra dedicada en la labor, un orgullo 100% escazuceño,
Esas primeras experiencias con bueyes en imágenes de tardes entre campo y montaña en San Antonio de Escazú fueron motivando día con día el amor y la pasión por una labor de todos los días: SER BOYERA ESCAZUCEÑA.
Rosaura es una vecina llena de sueños, de ganas de vivir y seguir aprendiendo y creciendo como estudiante, como persona y pronto como profesional, pero tiene claro que el ser boyera lo llevará hasta el fin de su vida.
No se pierda la entrevista con la dedicada al Día del Boyero que le trae Mundo Escazú este domingo 12 de marzo, Dia Nacional del Boyero.