“El aumento del tiempo frente a la pantallas y la digitalización de la vida ha llevado a que las personas vean más su propia imagen e imperfecciones que antes no veían y se
comparen mucho más con los demás, un fenómeno conocido como Efecto Zoom, aumentando la insatisfacción con su apariencia.
El 42% de ellas dicen que hoy tienen que preocuparse por cómo lucen en y fuera de las pantallas”, este dato y otros más se desprenden de una investigación que se hizo en 14 países de Latinoamérica por parte de la consultora especializada en el consumo en América Latina Grupo Consumoteca, cuyos resultados se dieron a conocer recientemente por parte de Merz Aesthetics.
La investigación, que fue elaborada para Merz Aesthetics y abarcó una muestra de un 48% de hombres y 52% de mujeres de Argentina, Brasil, Costa Rica, Colombia, Chile,
El Salvador, Ecuador, Guatemala, México, Paraguay, Panamá, Perú, República Dominicana y Uruguay, muestra que 1 de cada 4 afirma que la pandemia afectó su noción de belleza hasta el día de hoy.
Esta preocupación por la apariencia se ve agravada por la exposición a estándares poco realistas de belleza, como el uso de filtros en las redes sociales.
Otros hallazgos significativos de la investigación indican que el 47% de los latinos se volvieron más inseguros de su cuerpo durante la pandemia y una parte significativa de
ellos aún no ha vuelto a sentirse como antes. Además, el 17% de los participantes en la encuesta ya se sentían inseguros acerca de sus cuerpos antes de la pandemia, pero la
situación empeoró cuando esta terminó.
La investigación también revela que el 35% de las personas siente que la pandemia afectó negativamente sus habilidades sociales y su capacidad para relacionarse, mientras que el 42% cree que ha dejado un impacto duradero en sus vidas.
En todos los países estudiados, la población se considera menos sociable en comparación con la era pre-Covid-19, con un 80% que se autodefinía como sociable y ahora un 60% que aún se considera sociable o muy sociable.
Un 31% de los latinos ha modificado su percepción de la belleza debido a la pandemia, lo que ha contribuido al aumento de la demanda de procedimientos estéticos, especialmente los inyectables no quirúrgicos, que prometen resultados rápidos y seguros. El 59% de las personas cree que estos procedimientos son beneficiosos para recuperar la autoestima después de la pandemia, mientras que el 45% los considera parte esencial del cuidado personal y bienestar.
En cuanto a la percepción de los procedimientos cosméticos, el 72% de los participantes opina que estos pueden ser una forma de expresión personal. Los resultados muestran en general la compleja interacción entre la percepción de la imagen corporal, la influencia que dejó la pandemia y la búsqueda de procedimientos estéticos como respuesta a estos desafíos.
