En el marco del Día Mundial de la Alimentación 2024, cuyo lema es “El derecho a los alimentos para una vida y un futuro mejores”, POZUELO destaca la importancia de la microbiota en la salud y bienestar integral. La microbiota intestinal, popularmente conocida como “flora intestinal”, es el conjunto de microorganismos que habitan el intestino y juegan un papel fundamental en la digestión, la regulación del sistema inmunológico, e incluso en el estado de ánimo y la salud mental.
Estudios recientes han mostrado una estrecha relación entre la microbiota intestinal y el cerebro.
El eje intestino-cerebro sugiere que las bacterias intestinales pueden influir en la producción de neurotransmisores como la serotonina, que controla el apetito, causa la sensación de saciedad e influye en el estado de ánimo y el bienestar emocional; por eso se le dice “hormona de felicidad”.
Además, diversos padecimientos como la obesidad, diabetes tipo 2, enfermedades inflamatorias intestinales y algunas enfermedades autoinmunes, se vinculan con una deficiente microbiota. Compañía de Galletas Pozuelo tiene el propósito de construir un mundo mejor donde el desarrollo sea para todos y todas. En línea con esto, es esencial adoptar hábitos que favorezcan el crecimiento, diversidad y equilibrio de la microbiota, lo cual está relacionado con una alimentación más consciente y saludable, una dieta equilibrada, un estilo de vida balanceado con actividad física, adecuada gestión del estrés, buena higiene del sueño para descansar mejor y
sin fumado.
“Nuestra estrategia de bienestar integral Vivo con Sentido tiene un eje de Alimentación Consciente que trabajamos con nuestros colaboradores, por ejemplo ofreciendo menús variados en el comedor institucional y charlas de educación nutricional. Asimismo, a nuestros consumidores les hablamos principalmente a través de la marca Tosh, con el objetivo de fomentar una diversidad de hábitos para vivir en armonía”, comenta Aurora Marlasca,
Nutricionista de POZUELO.
Algunas recomendaciones clave para cuidar la microbiota son:
●Una alimentación variada y equilibrada: priorizar frutas, verduras, cereales integrales, legumbres y otros productos altos en fibra para mejorar la salud digestiva.
●Incluir alimentos fermentados: yogur natural, kéfir, kombucha, chucrut y kimchi son excelentes fuentes de probióticos, que promueven un ambiente intestinal saludable.
●Consumir fibras: innovando con las tendencias en nutrición y salud, la nueva línea de galletas Tosh con avena incorpora ingredientes funcionales como la avena de grano entero y la fibra prebiótica (inulina de maíz) que ayuda a alimentar a las bacterias beneficiosas en el intestino.
Estas galletas, disponibles en tres variedades, sabor ajonjolí y miel, sabor chocolate y cocoa, y sabor pasas con arándanos, aportan 5 gramos de fibra por porción.
Asimismo, según la evidencia científica, los alimentos ricos en fibra poseen un bajo índice glicémico, su consumo se ha asociado con una reducción de la glucosa en sangre, mayor sensibilidad a la insulina, mejor control del peso corporal y de la presión arterial, así como con una disminución del riesgo cardiovascular u otras enfermedades crónicas como infartos cerebrales, presión arterial alta, diabetes tipo 2 y obesidad.
●Hidratarse adecuadamente: favorece la digestión y el equilibrio de la microbiota.
●Gestionar el estrés: cuidar el ambiente, entrar en contacto con la naturaleza, compartir tiempo de calidad con los seres queridos o practicar técnicas de relajación.
●Evitar el uso innecesario de antibióticos: consumirlos solo cuando sea estrictamente necesario y bajo prescripción médica.