El Ministerio de Obras Públicas y Transportes comunicó que los conductores reaccionan molestos el vehículo que viene en sentido contrario trae las luces altas y no las baja, lo mismo ocurre con quienes quedan encandilados, por el reflejo de las luces altas del vehículo de atrás, reflejadas en los retrovisores.
Este tipo de conductas, el usar luces altas sin respetar a los otros conductores, tiene una sanción, según la Ley de Tránsito y asciende a los ¢56.000.
Además, con ese mismo monto, se sanciona otras conductas con las luces, como lo es no encenderlas entre las 6 pm y las 6 am, no usarlas encendidas siempre que se circula en la motocicleta o utilizar luces neblineras cuando no procede. También aplica la sanción cuando se utilizan luces de reglajes y potencias no autorizadas.
La Ley de Tránsito, quiso enfatizar Alexander Solano Quirós, director de la Policía de Tránsito, también es clara en que si las condiciones durante el día no son favorables también deben encenderse.
“Tenemos un serio problema de aprendizaje, en el que venimos insistiendo para cambiar hábitos, y es que algunos conductores no encienden las luces durante el día, pese a que las condiciones no son las mejores, en cuanto a visibilidad. Así, vemos vehículos con las luces apagadas pese a que van en medio de un fuerte aguacero, a que está oscuro o a que hay neblina, por dar unas ideas. También, a veces, a las 5:30 de la tarde está sumamente oscuro y no encienden las luces”, reprochó el funcionario.
En ese sentido, el representante del cuerpo policial quiso subrayar que las luces no son solo para ver el camino, sino para ser visibles ante los demás actores viales, sean ciclistas, peatones u otros conductores.
En lo que va del año, 1.544 conductores recibieron una sanción por violentar el artículo 103 de la Ley de Tránsito, que habla sobre el uso correcto de las luces del vehículo.