El cáncer de mama, cáncer de colon y recto, cáncer gástrico, y cáncer ginecológico; es decir, el de útero y cuello uterino, son los cuatro principales tipos de tumores cancerígenos que afectan a las mujeres en el país. Así lo señaló la Dra. Tatiana Soto, oncóloga radioterapéutica del Centro de Radiocirugía Robótica, quien explicó que esto se da ya que son los de mayor detección entre las pacientes.
El cáncer es una de las principales causas de hospitalización en Costa Rica. En los hospitales públicos, según estadísticas de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), entre 2019 y 2022, las mujeres tuvieron más internamientos, en ese período 42.235 mujeres requirieron de un hospital, contra 24.779 hombres. De acuerdo con la entidad, en el último año se hospitalizaron 1,73 mujeres por cada hombre.
De acuerdo con la especialista del Centro de Radiocirugía Robótica, el cáncer es un grupo de células que han desarrollado una capacidad especial para crecer descontroladamente e infiltrarse en los tejidos vecinos. Estas también se movilizan mediante el torrente sanguíneo para generar lesiones o hacer enfermedad en otros órganos que no son necesariamente donde nacieron.
Pero ¿por qué se genera el cáncer? “Todos, en nuestro cuerpo, tenemos células sanas que se pueden convertir en células cancerígenas. El organismo, por sí mismo, tiene mecanismos de defensa que normalmente identifican a esas células que podrían descontrolarse y convertirse en cancerígenas. Una vez identificadas, el mismo cuerpo las destruye. Sin embargo, puede suceder en alguna ocasión que esos mecanismos fallen. Allí es cuando esa célula logra escapar e inicia a crecer descontroladamente, convirtiéndose en cancerígena”, explicó la Dra. Soto.
Añadió que el cáncer también puede desarrollarse debido a algunos factores de riesgo que van de la mano con los hábitos de vida de las personas. Estos tienen que ver con obesidad, sedentarismo, fumado, abuso de alcohol. También existen algunos tumores relacionados al Virus del Papiloma Humano.
Síntomas de los principales tumores en las mujeres
De acuerdo con la especialista del Centro de Radiocirugía Robótica, el principal síntoma del cáncer de mama es un abultamiento en el seno. También se puede generar alguna secreción por el pezón, o la inversión del pezón; es decir, empieza a hundirse dentro del seno. Para la médico, de este tumor lo más importante es el diagnóstico temprano mediante el tamizaje a través del ultrasonido, la mamografía, y el autoexamen de mama.
En el caso de los tumores de colon y recto, estos principalmente se tratan de tumoraciones que se producen en el tracto gastrointestinal. Su mayor síntoma es el sangrado rectal, anemia, dolor abdominal e, inclusive, obstrucción intestinal. Otros síntomas pueden ser la pérdida de peso, y cambios en los hábitos defecatorios. Cuando esto sucede, se debe consultar para realizarse exámenes como rectoscopias o colonoscopias.
Por su parte, el cáncer gástrico generalmente está asociado a un dolor persistente en la boca del estómago, una sensación de llenura y la pérdida de peso. También, en ocasiones, se puede presentar vómito con sangre. Para su detección es necesario realizar una gastroscopia. “Hay que tomar en cuenta que Costa Rica es un país de alta incidencia de cáncer gástrico, por lo que, las personas, con los primeros síntomas de ardor y dolor en la boca del estómago, deben consultar para realizarse una gastroscopia”, mencionó la Dra. Soto.
En el caso del cáncer ginecológico (útero y cuello uterino), existe el tamizaje mediante el Papanicolaou para su detección temprana. Este se realiza una vez que la paciente ha iniciado su vida sexual activa. Generalmente, los síntomas están relacionados con sangrados vaginales anormales, sangrados después de las relaciones sexuales, o dolor pélvico.
Tratamientos y valoración integral
De acuerdo con la especialista, el riesgo de padecer alguno de estos tumores puede reducirse. Ello se logra, principalmente, por una mejora en los estilos de vida. Hay que mantener un peso adecuado, una dieta balanceada, tener el hábito del autoexamen en el caso del cáncer de mama. Además, tener relaciones sexuales con protección y tratar de no tener un número alto de compañeros sexuales. A ello se suma participar en los programas de tamizaje.
Entre los principales tratamientos para estos tumores, destacan la cirugía, la quimioterapia y la radioterapia. Este último lo que hace es que utiliza la energía de los electrones para producir paquetes de alta energía que se dirigen hacia el tumor, esto produce una muerte de las células tumorales por daños en el ADN y en el microambiente celular.
La Dra. Soto comentó que la radiocirugía es un tipo de radioterapia altamente precisa y focalizada, puede ser utilizada en pacientes de cualquier edad; sin embargo, en el caso de pacientes adultos mayores, o que tienen alguna contraindicación para ser sometidas a cirugías, esta puede ser una excelente opción. No obstante, que una paciente sea candidata a recibir radiocirugía robótica dependerá del tipo de tumor y el estadio clínico en que se diagnóstica.
“Cuando los tumores evolucionan, podrían presentar alguna recurrencia, si estas se detectan a tiempo y son focales, se pueden tratar con radiocirugía. Lo cual, de cierta manera, sustituye una cirugía para estas lesiones. Es decir, es un tratamiento que elimina por completo la lesión. Tratar estas lesiones con radiocirugía mejora de forma muy importante la sobrevida de estas pacientes. La radiocirugía representa una nueva esperanza de vida para las pacientes que, a pesar de haber hecho un proceso de tratamiento curativo, eventualmente tienen una recurrencia”, afirmó la oncóloga radioterapéutica del Centro de Radiocirugía Robótica.
Adicionalmente, la Dra. Soto añadió que, todas las pacientes que sean diagnosticadas por alguno de estos tipos de cáncer, también deben ser valoradas por un profesional en psicología oncológica. Esto porque, además de una afectación física, estos tumores pueden afectar profundamente la parte emocional de las pacientes.
“En el caso del cáncer de mama y el ginecológico, estos tumores están directamente relacionados a la identidad de género de las mujeres. Cuando las pacientes los padecen, como parte del tratamiento podría darse la extirpación o la disfunción de sus órganos femeninos, lo que las afecta bastante emocionalmente. Además, se puede producir un gran temor de cómo va a ser su tratamiento, cómo las va a afectar a ellas y a sus seres queridos, y el temor de que el tumor regrese”, mencionó la oncóloga radioterapéutica.
Asimismo, recomendó priorizar el autoexamen de mama y la mamografía a partir de los 40 años. También realizarse el Papanicolaou con la frecuencia recomendada según los niveles de riesgo que cada paciente pueda tener. De igual forma, las mujeres que tienen historia familiar de cáncer de mama, de ovario, colorrectal, o gástrico, deben ingresar en un tamizaje temprano. Esto para que las mujeres puedan identificar de forma temprana síntomas que en muchas ocasiones son muy específicos.